El grupo municipal de IU llevará al próximo pleno una moción con la que deja muy clara su posición sobre el conflicto entre Marruecos y el Sáhara Occidental. La única solución para la formación de izquierdas es que se celebre el referéndum de autodeterminación para que los saharauis decidan sobre su tierra.
El grupo municipal de IU en el Ayuntamiento de Casares defenderá en el próximo Pleno de diciembre una moción en defensa del Sahara Occidental, a raíz de que Marruecos rompiera el alto al fuego y atacara a población civil saharaui.
Desde el grupo de izquierdas han manifestado su “profunda preocupación porque la ruptura del alto al fuego pueda reabrir una guerra tan cruel como la que durante años enfrentó a los ejércitos de Marruecos y El Sahara”.
En la moción, IU declara abiertamente que el pueblo saharaui tiene que disfrutar de nuevo de su país y que, de una vez por todas, se tiene que celebrar el referéndum de autodeterminación acordado en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de 29 de abril de 1991.
El compromiso de la Unión Europea y de toda la comunidad internacional debe ser ayudar a las partes a alcanzar una solución política justa y duradera, que prevea la libre determinación del pueblo del Sahara Occidental, conforme a los principio de la Carta de las Naciones Unidas.
Además, España tiene una deuda histórica con el Sahara y como tal, debe contribuir a la aplicación de la libre determinación del pueblo saharaui y debe seguir dialogando para que la situación no derive en una sangrienta guerra abierta.
El pueblo saharaui fue abandonado por España en 1975, quedándose solo ante el invasor marroquí. La desigual guerra se prolongó hasta 1991, cuando el Sáhara Occidental optó por la legalidad internacional y agarrarse a la resolución 1514 de la ONU, que asegura (de palabra) el derecho a un referéndum de autodeterminación para los saharauis. Sin embargo, han pasado 29 largos años de espera en campamentos en mitad del desierto.
España «se lavó las manos» cuando Marruecos ocupó el Sahara.
El pasado viernes 13 de noviembre, Marruecos rompió el alto el fuego pactado con el Sáhara en 1991 al atacar su ejército a población civil saharaui, hecho que ha provocado que también el Sáhara se defienda con su ejército para exigir algo que es de sentido común: poder decidir sobre su tierra.
El Sáhara era hasta el año 1975 una provincia española, hasta que Marruecos lo invadió con su ejército, comenzando así una guerra. Ante esta ocupación, España “se lavó las manos”.
¿Qué hicieron entonces los saharauis? Hay 50.000 que están en Argelia en campamentos de refugiados, otros miles que han emigrado y están repartidos por todo el mundo, y otros muchos que viven en el Sáhara ocupado por Marruecos. Los que viven en los territorios ocupados sufren a diario situaciones de falta de derechos humanos, genocidios, opresiones, encarcelamientos, y un largo etcétera.
La guerra acaba en el año 1991 con un alto al fuego, después de que los saharauis liberaran parte de su país. Marruecos, a partir de ese mismo año en el que acaba la guerra, construye un muro, denominado el “muro de la vergüenza”, que rodea toda la parte liberada y separa el Sáhara en dos.
Marruecos se saltó el alto al fuego y construyó una carretera para conectar el territorio saharaui ocupado con Mauritania para poder exportar todas las materias primas, que son muchas y muy valiosas. Ante esto, los saharauis se negaron y personas civiles, personas de a pie, bloquearon la carretera para que no volvieran a pasar. Y Marruecos ha respondido atacando con el ejército a esa población civil, hecho que ha provocado que también el Sáhara se defienda con su ejército para exigir algo que es de sentido común: PODER DECIDIR SOBRE SU TIERRA Y QUE SE ACABE ESTA OCUPACIÓN.